De usa suite ha pasado
a una noche de cárcel
el director del FMI
por asaltar a una dama.
Era un canalla el señor,
nada señor en sus actos,
socialista de derechas,
derrochón en lujos caros.
De Nueva York a París
y de París a cualquier parte
ha saltado el escándalo.
Dice su abogado ahora
que su cliente no es culpable.
¿Habrá sido la viagra?