No puede Contador
con los kilómetros
que le ponen la meta
en la inalcanzable altura.
Sus piernas se cansan
y no responden,
pero resisten sin perder
muchos minutos,
mientras los tertulianos
de las radios dicen
que este hombre del filete
aún puede triunfar,
creamoslo, en la última línea,
la de la gloria.
Yo, casi no creo,
en el improbable triunfo.
Las piernas, amigo,
no te ganan el tour 2011.