Cristina está pensando
divorciarse de su esposo
tras ver que se le ha ido
para la cama de otra.
La otra es abogada,
más joven y algo sosa.
Ella es la princesita
que queda en Ginebra sola.
Las fotos de don Iñaki
andan por esos periódicos
que en papel y online
la declaran la cornuda.
¡Pobre Infanta Cristina!
¡Enamorada y sola!
Iñaki le ha marchado
con una robaesposos.
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Con los cuarenta cumplidos y los cincuenta lejanos encontró Ainhona Armentia el amor en el trabajo. Su príncipe es el ma... newyorkchic1.blogspot.com |