Enrique Ponce estaba
desenamorado y solo
cuando encontró a su Ana
aplaudiendo a los toros.
Ana dejó a un futbolista
cuando el torero dijo
¡olé, mi chica hermosa!
Ya no estudia tanto
la chica que estudiaba
Derecho en Granada
mientras subía fotos
de modelo a las Redes
porque tanta belleza
no es para gastarla
luchando en tribunales.
Ahora lucha Ana
por ser segunda esposa
del torero que dice
no haber sido infiel
a la pobre Paloma
que le juró amor
cuando no había nacido
la joven chica rubia.